* Esta es una secuencia de un sueño: los sueños de Jace sobre Raphael, en una escena que
fue cortado de la versión final de Ciudad de Cristal .*
* Jace no podía dormir. Permaneció despierto en su lado, mirando a través de la pequeña ventana la luz de la luna llenando el espacio a donde Alec dormía en la cama de al lado.
Se les habían dado las habitaciones más pequeñas en la parte superior de la casa - Isabelle y Max tenía la habitación contigua a la suya, muy a su disgusto mutuo - ya que el techo caia abruptamente a dos aguas, los muros inclinados en un ángulo tal que era difícil ponerse de pie a menos que estuvieras en el centro de la sala, y sentarse en la cama de repente por lo general llevaba a un golpe en la cabeza.
Alec era una sombra encorvada en un mar de sábanas blancas, con la cabeza apoyada en el brazo. Con los ojos cerrados tiene un tono azulado en ellos. Dormido, parecía no mayor de lo que era Jace cuando llegó por primera vez al Instituto en Nueva York.
Jace pensó en ir a través de la habitación y despertar Alec, sólo para tener alguien con quien hablar, pero supuso que no era muy generoso, de su parte. Sin embargo, casi cualquier cosa era mejor que estar solo con sus pensamientos --
“Wayland”. La palabra era poco más que un susurro, tan suave que Jace pensó que por fin se había dormido y sestaba soñando. “Wayland”, Jace se puso de pie llegando a la ventana, todavía preguntándose si estaba soñando, estaba cerrada, vislumbró su propio reflejo en cristal, su cara muy pálida en contraste con su negra camiseta, luego empujo la ventana aasomandose por esta.
El aire frío se derramo en la habitación. Jace se asomó en el alféizar. Desde aquí podía ver el brillo del agua en el canal de abajo y luces en casas a la distancia. Era difícil notarlo, sin embargo, vio inmediatamente al vampiro que se encontraba cuatro pies abajo.
Jace se tenso. Podía ver los músculos en sus propios brazos los que se preparaban contra el alféizar. "¡Rafael?"
El vampiro sonrió. Era ligero, más pequeño que Jace, con una maraña de oscuros rizos. En la vida, su piel había sido el color del café, oro, ahora era pálido, y sus ojos enormes y oscuros. Llevaba una camisa blanca, abierta en el cuello y el flotaba suavemente, como una hoja en la corriente.
"Wayland," dijo con su voz suave y acento. "Me preguntaba si me habías oido. "
"Pero - ¿qué estás haciendo aquí? ¿Cómo … los guardias?- "
Raphael se rió suavemente, y Jace se dio cuenta , tardíamente, que el viento no movia su pelo.
"No sabia que las proyecciones podrían llegar tan lejos", dijo Jace. "Es dulce que hayas venido hasta aquí para flotar alrededor de mi ventana. Cómo puedo obtener una serenata?
Rafael dijo algo en español que no sono Jace como particularmente musical. "Eres tan arrogante, Wayland. Nunca puedo decidir si es encantador o molesto. "
"Es afilado, gracias", Jace agrego.
"Pero yo no he venido aquí a hablar de ti", Raphael continuó. "Vine por el Daylighter ".
"Simón?" Jace sintió una punzada de ansiedad disparar a través de él, aunque no podía Decir que estaba sorprendido. "esperas que te diga donde esta , verdad? Esta en un lugar seguro lejos de tu clan, y eso es todo lo que necesitas saber. "
Rafael sonrió con facilidad, y sus colmillos brillaban como agujas blancas a la luz de luna. “¿Lo esta? "
Jace se inclinó más por la ventana, dejando al aire frío de la noche despeinar su
pelo. Se sentía bien. "¿Cuál es tu punto, vampiro?"
"Un acuerdo", dijo Rafael. "Hay una guerra que se avecina. Lo sabemos. Todos los submundos
lo saben. ¿Qué dirías si prometiera el apoyo de todos los hijos de la noche contra valentine cuando venga a destruirlos? "
"Me gustaría saber lo que querrías a cambio."
"El Daylighter", dijo Rafael. "Eso es todo."
"¿Quieres que te dé Simon? Jace sacudió la cabeza. "No, no es una posibilidad".
"¿Crees que la intención es hacerle daño," dijo Rafael. "Yo no. Yo no soy quien lo considera como un peligro. De hecho, si pudiéramos aprender qué es lo que es - "
"No estoy seguro de cuales sean tus métodos de aprendizaje."
"Mejor que los lobos." eltono de Rafael perdió la calma. "Ellos lo desgarrarian " Abrió las manos. "No se puede ocultar para siempre."
"Yo podría intentarlo", dijo Jace."Además, ¿qué te hace pensar que tienen la autoridad para hacer un trato así? "
"Eres el hijo de Valentine", dijo Rafael en voz baja. "Puede llegar el momento en que toda la Clave te escuchará. Usa ese tiempo con sabiduría. "
¿Te refieres a utilizar ese tiempo para conseguir lo que quieres ".
"Tendras todo lo que necesitas para ganar esta guerra", dijo Rafael. "Así como fue Durante el levantamiento, no se puede ganar sin nosotros. Sabemos que Valentine va levantar un ejército. Sabemos dónde está. Sabemos muchas cosas, cosas que no puedes permitirte el lujo de ignorar - "
"¿Sabes dónde está?" Jace se inclinó hacia adelante con tanta rapidez que estaba en peligro de caer por la ventana. "Rafael, si conoces la ubicación de Velentine -" Rafael rio suavemente como la piel de un gato, y envió un escalofrío de la electricidad estática hasta la columna vertebral de Jace. "El Daylighter, Wayland. Recuerda nuestro trato. "
"No tenemos un acuerdo", dijo Jace. La luna había salido de detrás de una nube, miró en contra de su brillo.
"Pero lo haremos", dijo Rafael. "Lo haremos." Levantó las manos, y vio Jace que se habían vuelto transparentes: se podía ver a través de ellas a las torres de la ciudad abajo. Observó en silencio, mientras el cuerpo del niño vampiro se volvió transparente, como si la luna, al golpearlo lo conviertiera en cristal.
Y entonces los cristales se rompieron, y Jace se quedó mirando el vacío , la luz de la luna y las ventanas de las casas lejanas donde todo el mundo estaba dormido*
Cassandra Clare nació en Irán y pasó sus primeros años viajando por el mundo con su familia y varios baúles llenos de libros de fantasía, entre los que se contaban las senes de Las crónicas de Narnia y Los seis signos de la luz. Más tarde, trabajó como periodista en Los Ángeles y Nueva York, donde reside actualmente.
Entradas
